martes, 21 de diciembre de 2010

La Sagrada Contradicción

De la placenta, del universo creado por hombre y mujer, nace la raíz de toda contradicción. La vida, nace algo que va a morir, respira algo que dejará de hacerlo y late en sus venas la sangre caliente que se volverá azul y enfriará. Nace algo que cagará y creará belleza, algo que creará vida y matará, algo que amará y odiará. La placenta con sus pulmones y estrellas le dará vida a esa vida que algún día morirá y esa muerte será la llave de otras vidas que circularán en el mismo líquido universo dentro de una mujer que junto a un hombre han creado vida y ellos mismos algún día morirán. Es una solución y un problema al mismo tiempo, es una lucha constante por el estado de gracia inexistente que se plantea como Dios y Demonio. Letra D, cuatro, símbolo de poder, doble D, ocho, símbolo de crecimiento interno, la base del espíritu humano, sobre el que se crea, infinito e ilimitado sobre las mismas fronteras del hombre, el balance, la vibración. Dios y Demonio, los límites del mandala, donde la vida recién creada juega en la infinita contradicción, se mueve en la base de sus vibraciones para variar entre las contradicciones. El medio, la aguja que pasa entre los puntos extremos de un 8, no existe. Todo o nada, amor u odio y la humildad del nacimiento en el universo de la placenta, donde el mandala pierde la unidad de su círculo para ser irregular como una ameba, es el juego mismo de la vida y la muerte creando vida mortal, el hijo del mandala que vive dentro de sí hasta que deja de hacerlo y deja detrás el espectro colorido que cada vida crea para ella. Es un juego infinito, el mandala de cada vida, la creación de cada contradicción.

2 comentarios:

  1. nubes y sol en valpo...
    cerro toro y luego cerro alegre...
    un payaso que grita e invita y luego saluda quien está detrás de él...
    timedez en en los cerros y ridiculo por doquier...
    extrañarse y no.

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  2. el más ridículo de todos!
    love ya!

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